domingo, 24 de junio de 2012

PODIA HABER SIDO UNA BONITA HISTORIA.





PODIA HABER SIDO UNA BONITA HISTORIA.
Hace unos meses, poco a poco fuimos encontrándonos gente en el facebook, coincidíamos en el sentido del humor, la política, empezaron a entrar en mi patio, decían cosas, ponían cosas, y poco a poco a través de una persona y cuando llegamos a Zaragoza, nos conocimos en persona.

Yo iba nerviosa, como una chiquilla, a una nuestra primera cita, pero al menos por mi parte, fue muy bien, me mostré como soy, natural, sencilla y sincera.

De allí salió otra “quedada”, en casa de una persona que nos la puso a nuestra disposición, todo bien.

Puse en toda esta gente, todo, porque quería que saliera bien, me sumé a sus comidas, y nos vimos más veces, en realidad lo pasaba bien, en esos ratos, me sentía bien, muy bien acogida.

De repente se cerró el Zaguán, y con el corazón en la mano, aún que hablo en singular, sé que Antonio, se volcó en estas personas, como yo, a corazón abierto, quizá un error, pero no sabemos ser de otra manera.

Siempre os agradeceré vuestras risas, canciones y la forma en que nos acogisteis.

No tengo nada que reprochar a vuestro comportamiento, no soy quién, solo hubo un error, y es no saber diferenciar, los amigos de los colegas.

Nunca me arrepentiré de compartir con todos vosotros algo tan especial como el cierre del Zaguán, jamás, pero tengo un gusto amargo...que tardará muchos días en desaparecer.

No nos conocíamos lo suficiente, pensé que la educación y el buen corazón eran suficientes, pero me equivoqué.

De la fiesta del Zaguán, al cabo de unos días, nos comunicaron que se había formado una Peña e incluso teníamos “cargo” en ella. Antonio se volcó, puso, el logotipo, el escudo y el lema, la orla, los Mandamientos, que se creraron “para el buen funcionamiento” de la misma...que luego “alguien” se encargó de modificar, retocar y poner y quitar a su antojo, como todo lo que hace.

Una cosa que no me gusto y lo dije, fue,que se hacia una pagina como grupo cerrado, y solo podíamos poner fotos y comentarios los que formábamos parte de la misma...nunca me ha gustado pertenecer a nada cerrado...me gusta demasiado mi libertad, libertad que me ha costado mucho conseguir, quizá por eso la mimo tanto, pero se sometió a votación, eso me dijeron y se aceptó por parte de todos.

Nuestro error, y digo nuestro porque creo que hablo en nombre de Antonio fue no decir NO, gracias pero NO. No tenia que poner excusas no tenia que mentir, simplemente decir que NO, que yo no tengo salud, para esos “trotes” pero me dejé llevar por la ilusión y Antonio me secundó.

Desde el principio la pagina cerrada del facebook se convirtió en un pozo de problemas...

Yo estoy muy contenta de mi patio, y la persona que hizo la página quería trasladar el espíritu del patio a la Peña...imposible. Nada se puede forzar, tiene que salir, como ha salido el patio, todos somos libres de entrar, saludar, decir, siempre con humor y respeto, algo que empezó a faltar en la Peña.

Empezábamos a colgar comentarios, que me eran solicitados por privado, para que interactivara en la Peña...colgué algo, no mucho porque no me gustaba como iban volviéndose las cosas, el Administrador de la página, borraba lo que quería, quitaba comentarios que no le gustaban, hacia y desahacia como si fuéramos peones en una partida de ajedrez...no soy buena jugando, pero sé lo básico para jugar, y no me gustaba como se jugaba en la “peña”.

Una cosa que no soporto es la falsedad, y por privados, decían una cosa y luego sonreían a quién no hacia las cosas bien...

Otras gentes con las que no he coincidido nada más que un rato, se atrevían a criticar mis comentarios...decíamos de quedar en un sitio y esa persona decía en otro diferente, porque a él le venia bien...

La última noche que cenamos juntos, fue bochornosa...pero la acepté como parte de la “peña”, me dí cuenta, hablándolo con Antonio, que teníamos muy pocas cosas en común. Todos ellos se conocían, y compartían muchas cosas, nosotros no.

Al día siguiente el administrador de la página, colgó un texto, en el que se “quejaba” del comportamiento de la peña, la noche pasada, algo que nosotros habíamos comentando en privado. No es justo que alguien tome una tostada de 3,80 Euros y dos cañas y pagué lo mismo que otros que tomaron menú, repitieron plato, tomaron vino, vino que no corrió por la mesa y tomaron Cubatas... Al principio nadie decía nada, menos los que se habían pasado de comer y beber y luego a la hora de pagar, habían contado por cabeza, no por el gasto efectuado. Nosotros, los últimos en llegar, los que no teníamos nada que ver con todos, nos callamos y pensamos que eran ellos, los amigo, los que se conocían los que tenían que resolverlo, nada, nadie comentaba nada. Hasta que recibimos ambos, privados de parte del que colgó el texto, pidiéndonos que comentáramos, por favor, lo que él había puesto, un buen texto, diciendo lo abusivo del comportamiento de parte de la peña. Yo le comenté que me sabia malo decir nada, porque era la que menos conocían, y él me aseguró, tengo los privados, que me dijo NO TE PREOCUPES QUE TODOS VAN A OPINAR, LES VOY A DECIR QUE PONGAN ALGO, QUE DIGAN LO QUE PIENSAN PARA TRATAR DE ARREGLARLO. Mi buena fe y la palabra de esa persona me llevaron a hacer comentarios diciendo que no había sido correcto el comportamiento, y Antonio también hizo comentarios, pedidos por la misma persona, diciendo lo mismo, que no era justo. Buenoooooooooooo, acabamos siendo los culpables...los que se dignaron a hablar, que comer comen muchos, pero leer y escribir pocos, nos llamaron protestones, y el que había hecho el escrito y nos había pedido nuestras opiniones, se mantuvo al margen, calladico...calladico, tirando la piedra y escondiendo la mano. No nos gustó eso, nos hecho a los pies de los caballos y luego él no dijo nada, no nos apoyo, siendo que además nosotros teníamos la razón. JAMAS, JAMAS, NADIE A PAGADO NINGUN CAPRICHO MIO, NUESTRO, Y DESDE LUEGO NO ESTABAMOS DISPUESTOS A PAGAR LO DE LOS DEMAS. Eso quedó claro, pero los “culpables” nosotros. Aquí deberíamos de haber dicho adiós, pero me sabia mal, creo en la gente, y la gente hablando se puede entender.

No obstante nos callamos como personas educadas, pagamos una cena que en nada tenia que ver el espíritu que se suponía tenia la peña, y a otra cosa. Se decidió la siguiente quedada en otra cena, malo, para una persona enferma como yo, que a las 9 de la noche tiene que tener la medicación ya en el cuerpo...tampoco dije: oye vamos a juntarnos a almorzar, NO, porque soy respetuosa con los demás y porque la vida me ha enseñado que los demás no tienen que cambiar su vida por mí, pero desde luego yo no estaba dispuesta a poner en riesgo mi salud, por gente que me estaba defraudando y mucho, y ya digo que fue mi error, creer que eran amigos. Amigo es una palabra que abarca mucho y nosotros solo eramos “conocidos”...no sé cuando aprenderemos, quizá nunca, porque somos cándidos y tenemos bondad y creencia de que todo el mundo es como nosotros, pero no es así. Se decididó salir a las 7 de la tarde en una charanga, tocando, que tiene eso que ver con la peña que se formo originariamente? Nada, porque mezclamos cosas, no eramos una peña, para reunirnos, hablar, reír, yo no entendía nada, pero me callé, no fui y no dije nada, por no crear mal ambiente. El mal ambiente que se encargo otra persona de producir...

Puse una entrada en la Peña, de las pocas cosas que ponía, sobre el porque no iba a asistir a muchos de los “saraos” que tenían previstos, nadie comentó nada.

Como muy poco, ceno nada, y entre medio tengo que descansar. Para comer o cenar no saldría ni de casa, no necesito a nadie. El salir era la escusa para estar a gusto, algo que ya no estaba ocurriendo, el desencanto se había apoderado de nosotros. No podemos con la falsedad. No hablamos en “clave”, a nosotros se nos entiende muy bien, otra cosa es que no te guste lo que decimos, pero a lo mejor tampoco me gusta a mi lo que tu dices...y para convivir en todos los sitios y situaciones, hay que saber hacerlo.

Una persona que se cree el tuerto en el País de los ciegos, nos estaba manipulando...y hasta aquí, hemos llegado.

El día de la última cena, a la que nosotros nos asistimos pedí con toda la generosidad que pusieran las fotos, porque soy y no peco de modestia, soy tan buena persona que me alegra la alegría de los demás, y os pedí que pusierais las fotos para ver vuestra alegría. Y cual es mi disgusto cuando el Administrador de la página cuelga las fotos y dice que disfrutemos los MIRONES, inmediatamente le contesté, que a un compañero de peña, no se le insulta. Podía haber dicho que ponía las fotos para que los componentes de la Peña que no habían acudido por diversos motivos, disfrutaran viendo lo bien que lo habían pasado...
Unas palabras no difíciles de poner para una persona que se cree tan educada y culta, y además con mucho “don de gentes” por eso creo y nadie me sacará de esa creencia que empleó la palabra para ofender y herir, y si me heriste porque soy mejor, mucho mejor de los que tu serás nunca.

Gente de la peña que no me ha hablado en estos meses nunca, se digno, a decirme que no debía de sentarme mal...quién eres tu para decirme lo que me tiene que sentar mal o no...?

La gota que colmó el vaso fue ese comentario fuera de lugar, dicho con mala intención y peores formas. Nosotros te estorbábamos porque no nos manejas a tu antojo, porque no nos puedes manipular, porque te hemos visto el “plumero” porque te miramos a los ojos de tu a tu, porque no nos reímos de tus gracias y porque no has sido ni buen colega, que ya no amigo, ni educado, ya que presumes tanto, ni gente de bien, que no lo eres, porque te pedí una disculpa a tu insulto. No hubiera servido de nada, porque ya habíamos decidió irnos de una Peña donde no nos sentíamos a gusto, pero no fuiste capaz de bajar de tu pedestal y reconocer que te habías pasado.

Encima varios de los integrantes nos quitaron la razón y te la dieron a ti, te guardan fidelidad, hacen bien, tu eres su amigo, nosotros no sabemos el que hemos sido para vosotros. Algunos, por privado me reconocieron tu soberbia, tu mal hacer las cosas y tu forma de ser...pero no tuvieron ni la dignidad ni la vergüenza de decírtelo...

Ahora, ha pasado una semana, e incluso no entráis en mi patio con la asiduidad con la que lo hacíais ni ponéis comentarios...no os sintáis obligados, iros, porque ya habéis demostrado lo que sois.

Sé que no os importa pero os voy a decir que incluso vuestro comportamiento afectó a mi salud, precaria, no puedo disgustarme y os tenia aprecio, aún os lo tengo porque no se puede borrar de un día para otro, pero me hacia daño la tensión y vuestra forma de tratarnos.

Quiero deciros que no me arrepiento de haberos conocido, de los ratos que hemos pasado juntos, pero es eso, PASADO, os deseo todo lo mejor a TODOS, y que sigáis con vuestras vidas y la Peña, a la que tanta ilusión pusimos.

Con este texto doy por terminada nuestra experiencia de la Peña, jamás volveré a comentar nada, ha sido una lástima, porque PODIA HABER SIDO UNA BONITA HISTORIA.

lunes, 11 de junio de 2012

MI ETAPA EN ALBARRACIN



No voy a entrar en lo que ha significado el lugar,que para eso tengo una entrada de las más preciosas de mi blog, describiendo el lugar, tampoco se trata de una “venganza”, solo es una reflexión de las gentes del lugar y de mi experiencia de vivir allí cerca de tres años.

Antes de ir a vivir, ya me habían comentado familia y no familia, que era un lugar inhóspito para los de “fuera” que eran envidiosos, maleducados, orgullosos...muchos calificativos y ninguno bueno, de gente que incluso había nacido allí. Yo siempre les decía que no seria para tanto, que había vivido en varios sitios pequeños y que es verdad que la gente vive muy pendiente de los demás, pero es puro aburrimiento, no tienen nada más ni mejor que hacer, sus vidas están vaciás y quieren llenarlas sabiendo las vidas de los demás.
Había ido varias veces a pasar el día, y eso no contaba, para el ritmo del lugar, unos saludaban y otros no, vale.
El primer “contacto” serio, llegó el día de mi boda, con Antonio, una persona nacida allí y que ha vivido durante más de 30 años, e incluso a tenido varios negocios en el lugar.

Era un día frío, muy frío, de Febrero, no había nadie en la plaza, pero un grupo de mujeres se juntaron enfrente del juzgado, para mirarnos con todo el descaro y no tener la buena educación de acercarse y saludar e incluso ya que estas allí, evidentemente, alcahueteando, dar la enhorabuena, NO, yo oí perfectamente como decían que estábamos solos...
Ellas no sabían que nosotros queríamos estar solos ese día, era nuestro, solo nuestro, nuestros respectivos hijos, por decisión nuestra no vinieron ni incluso supieron que nos casábamos, hasta un tiempo después.

Sin saber nada de eso, al ir a tomarnos un café., porque la mañana era heladora...el casino, estaba lleno, figurándose que iríamos allí, y entonces la alcahueta oficial del lugar, en vez de saludar, solo le pregunto a Antonio, porque no estaban sus hijos...como si hubieran sido ellos los que no hubieran querido venir, para hacernos un feo...se puede ser más mala?...También hubo comentarios, de que mi vestido era feo... no sé como pudieron decirlo porque no me quite el abrigo ni en la ceremonia...me imagino que esa información saldría del Juzgado, porque tiempo después supe que una funcionaria del mismo, tomaba café con la plana mayor de alcahuetas del lugar. Si me hubiera quitado el abrigo abría visto el más bello vestido que pudiera imaginar, porque era el que yo había elegido para ese día, nuestro día. Y puedo asegurar una vez visto como visten allí, que no he visto un vestido igual en ningún acto oficial, a ninguna mujer del lugar. Esto hablando de “trapos”, algo que no tiene importancia, solo la maldad de unas personas que solo son felices tratando de hacer daño, incluso con mentiras.

Pasado un tiempo decidimos irnos a vivir allí, también habiendo sido avisada de la mala gente que habita el lugar.

Soy una persona que a viajado mucho y a vivido en varios lugares, en todos, puedo decir, que tengo gente que aprecio y que mantengo contacto regular, soy educada, abierta en el trato y muy considerada con todas las personas.

Lo primero que me extrañó al ir a vivir allí es la gran “diferencia social” que tienen muy acusada. Están los de la clase que ellos creen alta y los otros... Algo incomprensible para mi, que me tengo por una ciudadana del Mundo, con todos los derechos y obligaciones que cualquier habitante del lugar.

Hay un grupo, que no me gusta denominar como clase alta, porque para mi, una vez conocidos, son unos miserables, y no me gusta insultar. Parásitos que han vivido y muchos aún viven de las rentas de sus antepasados, que muchos de ellos hicieron fortuna de forma “ilegal”, y ahora son gente venida a menos, pero con muchas ínfulas de clase...clase, que clase?
Un empleado de banco que se cree el Ministro de Economía.
Una dueña de una tienda, que no ha hecho nada más que heredarla de sus mayores.
Un dueño de un restaurante que no ha hecho nada, que lo ha recibido de su familia, sin ningún sudor ni merito suyo.

Pero que se dignan en no dirigirte la palabra, en ignorarte, en pasar delante de ti en la fila de una tienda e incluso en la visita médica.

No podía entender lo que ocurría en el lugar, hay que vivir allí para entender la vida diaria de ese grupo pequeño de personas que viven anquilosadas en el pasado.

Me han insultado, se ha reído de mi, me han puesto todas las pegas posibles para que no abriera el local, me han amenazado con denuncias, me han denunciado...que les he hecho yo a esas gentes?
NADA, ABSOLUTAMENTE NADA, ese es el problema.

No fui detrás de ellos para que me incluyeran en su “club”, no hablé con nadie, más que de cosas banales, no les dí información de mi vida, de mi familia, de mis estudios, de mis gustos, que por supuesto nada tienen que ver que los de ellos.

He sentido sus miradas clavadas en mi nuca, cada vez que pasaba por las terrazas de la plaza, no he oído su saludo, cada vez que me cruzaba con ellos por esas calles pequeñas, porque no tienen ni vergüenza ni educación, yo siempre he saludado pero nunca han devuelto el saludo.

Es curioso, yo conocía algunas de esas personas, porque por circunstancias personales pasadas, he ido varias veces, me trataron fenomenal, me agasajaron, me trataron con una “falsedad” muy grande, porque cuando volví como una habitante más del lugar y no me recordaron, se mostraron como lo que son, unos aduladores para la gente, más falsos que Judas..
No he tenido relación con ningún vecino, cuando sales a la calle o se meten en su casa, o te ignoran...

Estas gentes no están acostumbradas a que la gente las trate con más educación y saber estar que ellos, he ido muchas, muchas veces al Ayuntamiento, y no me han tratado como deben hacerlo los funcionarios, y de eso, se mucho. Los he puesto a más de uno, empezando por el Alcalde, en su lugar, muy educadamente, pero en su lugar, porque yo sé, siempre lo he sabido el mio, lo que no saben ellos es el que les corresponde por su trabajo.

Existe tanto amiguismo, tanto caciquismo, como ningún lugar que yo he conocido anteriormente. Gracias a que sé moverme por los Organismos Oficiales, porque me han puesto una y mil pegas, para que no abriera el Zaguán, y luego una vez no conseguido pararme, me han puesto pegas para darme la luz...me tuvieron un mes de verano sin venir a dar la cometida de luz, hasta que llamé al Director Gral. de Zaragoza, y hablé con él por teléfono y le expuse como me estaban tratando esos empleados del lugar, que si no eres amigo suyo, o no reciben la orden del Alcalde del lugar, no tienes nada que hacer, estaba tan desesperada que solo me faltó ir a denunciarles ante la Prensa, porque ante la Guardia Civil, ya lo hice...El señor alucinaba con lo que le conté, eran las 12 del mediodía, y a las 4 de la tarde, mandó una cuadrilla, fuera de hora, para que conectaran la luz de mi local, y todos preguntando que yo que quién conocía para hacerlos ir de propio a esas horas a conectarme la luz...luego el Director de Endesa, me imagino que no se fío y me llamo para preguntarme si ya me habían conectado la luz, le dije que si, y se lo agradecí infinitamente, el señor me dijo que el agradecido era él, porque yo le había informado de una situación que el ignoraba y que no se podía tolerar, me indicó donde debía de ir a poner una queja, cosa que hice, y se despidió lamentando las molestias que me habían causado...no sé si caerían cabezas, pero merecían caer muchas, pero algunas de ellas desde luego no cayeron, porque siguen ejerciendo ese pequeño gran poder que les ampara la Política Local, advenedizos, que se pegan a un Partido sin ideales solo tener poder para beneficiarse ellos y sus familias y negar a los demás lo que por LEY nos corresponde, y lo digo con todas las letras, porque ahora mismo podría dar una lista con nombres y apellidos de gente que esta ejerciendo el poder administrativo del lugar de manera “irregular”. Amparados por las Urnas, eso sí. Pero no por los Derechos.

Después de entrar un “poco” en situación, voy a enumerar a ciertas personas que por sus características marcan la vida del lugar:

La que se cree una señora, la que va por la vida despreciando a los demás, porque ella ha sido la señora de... y ahora no es más que una caricatura de una mujer odiosa, envidiosa, alcahueta y con aires de ir perdonando a los demás...casi casi, tienen que hacerle la reverencia cuando se cruzan con ella...y además es lo peor, porque renunciar a tus orígenes es lo peor que puedes hacer, y ella le da vergüenza que la llamen por su “mote” de su familia, siendo que su padre ejercía un oficio honrado, pero pobre...pobre mujer. He visto como trata a otras mujeres, y no me explico como la siguen saludando, claro es la …..., le tienen miedo, respeto, siempre se distingue de las demás por la ropa, zapatos, pieles, joyas, sale diariamente a la calle como si fuera una Duquesa, no la de Alba, seguro. Esa “señora” me hablaba pero empezó a querer saber de mi vida, a preguntar, a querer entrar en mi casa, y como con mucha educación, la puse en su lugar, la calle, ya no le gusté...todo el mundo la llama de usted, y un día, yo dejé de hacerlo, mi educación me dice que es una persona mayor, y tengo que tratarla de usted, pero por su actitud dejo de merecerlo, y le dije, que no me conocía que no hablará de mi, que no sabia nada de mí, y que mucho cuidado con lo que decía...porque le ponía un juicio por injurias, como fuera difamándome con mentiras, como otra de sus “amigas” que se digno decirme que tendrían que echarme del pueblo, que como había tenido valor de ir allí, siendo que vivía la mujer de Antonio en el lugar, LA MUJER de Antonio soy yo, pero aunque no lo fuera, tengo todo el derecho a vivir donde quiera, con tal de que cumpla con la Ley, pague mis impuestos y no dé escándalos, algo que nunca he hecho y que algunas de esas”señoras” no pueden decir lo mismo. Otra amenaza de juicio y ya no me hablaron más.

Luego esta la ALCAHUETA OFICIAL, la que es una metomentodo, y le gusta y lo lleva a gala, y te para, te sonríe y te pregunta, lo más inverosímil, lo más íntimo,sin el más mínimo pudor...Nunca me digne en contestarle, le sonreía, que eso j... mucho, y la dejaba con la palabra en la boca.

Luego esta LA PEÑA, un grupo de personas que se juntan, con unas ideas políticas completamente contrarias a las miás, pero a diferencia de mi, que siempre respeto la opinión de los demás, ellos no respetan la tuya, te insultan y te dicen menos bonito, de todo...NUNCA, tuve relación con nadie de ese grupo, y cuando abrí el local, hicieron esfuerzos por entrar en él, nunca lo hicieron si no los hubiera echado, a través de otras personas intentaron entrar y a esas personas aún a costa de que dejaran de venir también se les dijo que si venían acompañadas de alguien de esa peña, no entrarían ninguno.

VECINOS, que vergüenza..son pocos y malos. Están, pocos los que viven todo el año, y no te dicen ni buenos días, pero cuando necesitan algo tuyo, tienen la desfachatez de acercarse como si tal cosa y pedirla, ni siquiera por favor...Luego están los que vienen para el Verano, esos son peores, vienen con unos aires...de que vas? Esos no te dicen nada,ni te saludan, pasan a tu lado, ignorándote...lo nunca visto en ningún lugar en el que antes he vivido.

Las DUEÑAS, de las tiendas que te sonríen falsamente, porque les compras, pero les ves los dientes como a los lobos...nada de fiar.

Hay dos situaciones que he vivido en Albarracín que han sido especialmente “desagradables”. Cuando hicimos la mudanza, se congregó la gente enfrente de la puerta de casa, para mirar, ver, saber...y nadie, nadie...dijo queréis que os ayudemos? Al contrario estuvimos oyendo comentarios soeces, que puedes esperar de esa gente...

Y una cosa que me hizo daño fue la última vez que mis padres vinieron, ya mi padre muy enfermo, al salir del coche, los dos dieron las buenas tardes, y esas gentes del lugar no les contestaron, desde ese día, jamás volví a saludarlos...

Han visto a mi hija con muletas, por una operación, han mirado con mucho descaro, pero nadie a venido a preguntar como hace la gente de bien, de cara, que pasa?
Han visto el coche del médico de Urgencias más de una vez en casa...lo mismo, mirar, querer saber, pero no ser buena gente, buenos vecinos y preguntar, jamás.
Allí empecé a usar por primera vez el bastón, comentarios cuando pasaba...cuchicheos, allí he llevado la pierna varias veces vendada...lo mismo.

Abrí digo en singular, porque lo hablo desde mi punto de vista, el local, y se hizo una fiesta para todos los que habían participado en la obra, vale.

Luego el primer día de apertura, por decisión de Antonio dijo que no se cobrará a nadie, y ocurrió una cosa vergonzante, entro gente que no me saludaban por la calle, comió como verdaderos cerdos, algunos, hasta criticaron lo que yo les serví...y nunca más volvieron a entrar.. que educación..Yo he tenido muchas invitaciones, a muchas no he ido, pero lo que jamas he hecho ni haré será entrar a un sitio, comer hasta hartarme y no volver más...pues de esos en Albarracín, MUCHOS.

Tengo que hacer tres salvedades de toda esta porquería de población...

Unos vecinos, que no son de nuestro País, han sido y son como las personas de bien, hemos compartido charradas en la calle, hemos preguntado por las familias, si se ha enterado o nosotros de algo, hemos preguntado sin maldad, los niños con nosotros y nosotros con ellos, encantados, cuando han tenido fiesta en su casa, nos han traído comida, una costumbre muy popular en su País, hemos compartido muchos tés y dulces, algo muy común a su Cultura, como gran admiradora de su País hemos tenido muchas charlas de lugares, costumbres, cultura, de todo. Hemos compartido recetas de cocina.
Y ellos me han agradecido el trato que siempre he tenido con ellos, porque me han dicho que solo nosotros los hemos tratado “normal”, yo les he dicho que era mutuo, que el respeto lo dan el ser de las personas, no el tener. Ellos son considerados “chusma extranjera” cuando la verdadera “chusma” esta en los oriundos del lugar, los lugareños retrógrados que se han quedado estancados en algún siglo atrás...

La excepción que confirma la regla son unos vecinos, que tienen casa en la calle y él es de Albarracín, cada vez que venían charrábamos, nos veíamos y lo que hacen los vecinos, incluso intercambiar chitos de macetas, lo normal de gente de bien.

Y luego una pareja del lugar, la única, el señor, de Albarracín y ella de una Masía del lugar, que les ocurría lo mismo con nosotros charraban, nos reíamos, y nos decían, la gente de aquí...es mala, envidiosa, ella me decía llevo más de 40 años...y me siguen tratando mal, pero no me importa, nunca los he necesitado, vivo con mi marido y mis hijas y nietos, y he ido a limpiar por muchas casas, porque eran tiempos difíciles, y ahora no me saludan, y estoy segura, que ahora, tengo yo, más que ellas...y yo le dije por lo menos tu tienes dignidad algo que ellas no conocen. También al principio se extrañaban que yo fuera así, le decían a Antonio, que mujer más maja tienes, es que dicen que es una sosa...y yo le decía, de mi no pueden decir, nada, más que mentiras, porque nadie, nadie me conoce, no quiero que me conozcan, algo que he llevado y llevo a gala, después de vivir allí, en un lugar muy pequeño no me conoce nadie, tal y como yo quería.

Han sido años felices porque hemos vivido con ilusión la apertura del Zaguán, algo que ha sido un éxito que tampoco nos han “perdonando”. Pero a la vez han sido años duros, yo que soy una persona muy trasparente tuve que ponerme una coraza, que al final me pesaba demasiado...


Hay una leyenda del Lugar que dice así:

“Albarracín mal fundado, con sus habitantes necios, que no merecen más aprecio que ser visto y ser dejado...”

Al parecer esta frase la pronunció un Obispo del Lugar, siglos atrás, que al apearse de su carruaje, tropezó y se cayó, lo que provocó en la concurrencia presente la mofa y las risas.

Han pasado los siglos, pero los habitantes de Albarracín, siguen haciendo “honor” a la sentencia del Obispo...

Aquí dejo una reflexión que resume, lo comentado más arriba, nadie puede ser mejor de lo que es ni dar nada que no tenga...

El Sabio (reflexión)

Un sabio, cierta tarde, llegó a la ciudad de Akbar. La gente no dio mucha importancia a su presencia, y sus enseñanzas no consiguieron interesar a la población. Incluso después de algún tiempo llegó a ser motivo de risas y burlas de los habitantes de la ciudad.

... Un día, mientras paseaba por la calle principal de Akbar, un grupo de hombres y mujeres empezó a insultarlo. En vez de fingir que los ignoraba, el sabio se acercó a ellos y los bendijo.

Uno de los hombres comentó:

- "¿Es posible que, además, sea usted sordo? ¡Gritamos cosas horribles y usted nos responde con bellas palabras!".

"Cada uno de nosotros sólo puede ofrecer lo que tiene" -fue la respuesta del sabio

viernes, 8 de junio de 2012

UNA MADRE CON ARTRITIS REUMATOIDE


Ahora echando la vista atrás, voy hilvanando cosas que antes de saber que tenía AR, ignoraba, o no les daba la importancia que requerían.

Mi primer embarazo, yo tenía 24 años, fue maravilloso, y ahora sé porque, los 9 meses los recuerdo como los mejores de mi vida, sin duda, y no me refiero solo a la alegría tan inmensa de estar embarazada, de tener un embarazo sin ningún problema, y vivirlo plenamente, sino porque me encontré muy bien, incluso mejor que antes de estar embarazada, ese cansancio que ya empezaba a hacerse notar y aquellos dolores que iban y venían, SE FUERON.

Años después, supe que en el tercer trimestre del embarazo, los síntomas de la AR, desaparecen, el cuerpo es muy sabio, protege la especie, y nuestro propio Sistema Inmunitario, el mismo que nos ataca sin piedad, se “cura” para llevar adelante el embarazo, y por eso el que me encontrara tan bien, que aún ahora, casi 30 años después recuerdo la fuerza que tenia y lo bien que me encontraba.

Nacio mi hijo, mi felicidad más absoluta, y cuando tenia 4 meses coincidió un traslado a un lugar con mucha humedad, niebla, y viviendo en una casa con un gran jardín y poco sol...
Allí empezaron a hacerse notar los dolores, pero no impedían hacer mi vida, podía con “Todo”, pero el cansancio ya se hacia patente, me preguntaba, si tengo 25 años, como es que no puedo hacer esto, como es que me levanto peor que me he acostado, porque siempre estoy cansada y empezaron los dolores a hacerse más intensos, pero no tenia inflamaciones ni deformidades, aún.

Tampoco tenía a nadie a quién decírselo...tenia verdadero terror a estar enferma, a no poder “hacer las cosas”, las hacía como podía, pero yo sabia en mi fuero interno que algo no iba bien, y no era una gripe, era diario, y no mejoraba.

Cuando por fin, aún en contra de la opinión del entonces mi marido, que siempre me dijo cuando le comentaba que no me encontraba bien: no te pasa nada, todos nos cansamos y los dolores, ya se te pasarán... Entonces en el pueblo teníamos un médico joven sudamericano, y me dijo al comentarle mis dolores en los pies, sobre todo, que tenia Ácido Úrico, yo extrañada, le dije, porque siempre he leído, y sabia los síntomas y la dieta que lo producía, no son los síntomas y además no sé como, porque no pruebo carne, vísceras, quesos fuertes...nada de lo poco que como puede producirme lo. Pero no obstante me hice los análisis y me salieron, según él, estupendos, NO tenia Ácido Úrico...

Y le dije: y ahora? Se encogió de hombros y me dijo que descansara.

Me volví a casa en la más absoluta tristeza. Vuelta a disimular, a mis padres porque no les quería preocupar y a mi marido porque no quiere ni puede ver a las personas débiles, según él, no enfermas. Así fueron pasando los dos primeros años de vida de mi hijo. Y cuando empezó el colegio allí vi que a mi me ocurría algo, no podía madrugar e ir y venir los cuatro viajes al colegio, hacia lo imposible, volvía a casa y me quedaba tirada en el sofá, allí empezó mi “manía” de hacer comida cuando me encontraba “mejor”, para el día que no podía casi ni levantarme de la cama...empezó la fiebre, los mareos, la sensación de estar permanentemente agotada. El primer años de colegio de mi hijo, que entonces no era obligatoria la enseñanza de los tres años, estuvo más días sin ir a clase que en clase, no podía llevarlo, ni conseguía levantarme de la cama, pero eso si, yo disimulando, su padre no quería saber y yo no decía nada.

Volví a ir al médico, entonces había otro...con el mismo resultado, empeñados en que era Ácido Úrico...todo me salió bien, y me dio una medicación porque tenia Anemia, y por eso lo cansada que me encontraba, esa Anemia que me ha acompañado tantos años de mi vida, y que me puso una vez en un estado grave, empezaba a acompañarme también...
En esos días tuve un problema dental y el Dentista me mando Antibióticos y Anti inflamatorios, un milagro, pensé, estoy mejor, los anti inflamatorios me están aliviando, me encuentro mejor, mi estado es más soportable, tengo menos dolores y puedo volver a llevar “casi” una vida normal...

Cuando terminé el tratamiento, volvieron los síntomas, pero más virulentos, volví al médico del pueblo, que entonces, ya había otro, y solución: recetas de anti inflamatorios, si te van bien, te los tomas...

Así estuve casi 7 años, con dolores, malestar, cansancio, fiebre, pero como no me encontraban nada, y el padre de mi hijo decía que todos tenemos dolores...y no pasa nada. Me autoconvencí que no me pasaba nada, que tenia que vivir así y ya esta. El niño fue creciendo, cada vez le hacía menos cosas y no tenia que llevarlo al cole, porque el pueblo era pequeño e iba solo.

Cuando mi hijo tenía 8 años, decidimos tener otro hijo, y tengo que decir que tuve miedo, mucho miedo, y le dije al padre de mi hijo: tener un bebé, ahora lo sé, requiere mucho trabajo, noches malas, y yo no me encuentro bien, te crees que estoy bien porque no me quejo y porque siempre tengo todo preparado pero tomo medicación y cuando este embarazada no podré tomarlos. Me dijo que él me ayudaría, me extrañó, porque nunca lo había hecho, y estaba en lo cierto JAMAS lo hizo.

Me quede embarazada de la que sería mi hija, fue un embarazado de riesgo, desde el tercer mes de reposo por hemorragias, con reposo absoluto, mis padres, se vinieron con nosotros, y entonces, yo estaba todo el día en el sofá o en la cama, los dolores desaparecieron, es verdad, pero me encontraba mal, tuve tanto miedo de que mi hija no fuera a nacer..cada día que pasaba con ella dentro de mí, me decía un día más, un poco más de seguridad de tenerla en mis brazos...Por si fuera poco a los 8 meses sufrí un Cólico Nefrítico...varios días hospitalizada, unos dolores terribles, peor que los de un parto, os lo puedo asegurar. Y encima sentir la pena en los ojos de mi hijo, que me preguntaba, tenía 8 años, constantemente, porque estas en la cama? Cuando te vas a levantar? Es porque la nena te hace daño, me decía enfadado, yo trataba de explicarle que no, que la nena no me hacía daño, y que no estaba enferma, solo embarazada y que tenia que cuidarme mucho.

Cuando nació mi hija, al despertar, solo preguntaba si estaba bien, tenia tanto miedo que le hubiera afectado mi situación, aunque me sometieron a todas las pruebas y me decían que el bebe se encontraba bien...siempre me quedó la duda, el miedo.

Estaba bien, era una niña preciosa, grande, hermosa, bella, no se reflejaba el padecimiento de su madre, todo lo daba por bien pasado con ella en mis brazos y mi hijo a mi lado.

Pero empezó un calvario, no sabía lo que me esperaba, mis padres se fueron, y yo estaba bien, no tomaba nada, y cuando la niña tenía casi 3 meses, un día de repente, ella lloraba, y yo fui a cogerla en brazos, y se me calló, mis manos no podían sujetarla, no tenían fuerza, estaban agarrotadas...empezaron a inflamarse y los dolores empezaron a recorrer todo mi cuerpo...

Entonces estaba ya en otro pueblo, y yo me compré los antiinflamatorios en la farmacia, para que ir al médico...eso sí, todo en silencio, en casa no se podía hablar de que me encontraba mal.

Pero no me hacían tanto como antes, no podía cambiarle los pañales, empecé a hacerlo con la boca, no podía abrocharle los botones tan pequeños...me faltaban horas en el día, no podía, fueron unos días tan horrorosos, que ahora al recordarlos me hacen sentir un escalofrío por todo el cuerpo.

Llegué a pensar que tenia un cáncer de huesos, no podía ser otra cosa...tanto dolor por todo mi cuerpo y ese cansancio...

Coincidió que vinieron mis padres a vernos, y cuando mi madre vio que cogía a mi hija con los antebrazos, no con las manos, me dijo: es que se te a olvidado como se coje a un bebé? Entonces le dije lo que me pasaba, que no podía que tenia las manos agarrotadas y sin fuerza...me dijo: ve inmediatamente al médico del pueblo, que nosotros nos quedamos con la niña.

Fui, era una doctora, y me dijo que volviera atrás y le contara lo que me estaba pasando en esos años...fue la primera vez que dije todo lo que sentía, mis dolores, mi miedo, mi negación, TODO. Lloré, fue la primera vez que alguien me escuchaba y no me decía que no me pasaba nada.

Ella, me dijo que tenía que enviarme al Hospital, pero hasta que me dieran la cita me iba a poner una inyección y me iba a encontrar bien...yo respiré, por fin, tras varios años, un médico, me decía que tenia una medicación y que no eran “figuraciones” mías.

Le pregunté que me pasaba y me dijo que no se atrevía a ponerle nombre, pero era un problema de huesos, para eso me enviaba a Traumatologia.

Que estuviera tranquila, que estaba enferma, que no eran figuraciones mías, y que tenía que tener mucha ayuda y comprensión...

Me inyectó, luego lo supe, Cortisona. Me dijo que en un par de horas me encontraría bien, no me lo creí, pero fue cierto.

Les dije a mis padres que se podía ir, que me encontraba bien, mejor que en años. Estaba tan bien, que ni me acordaba cuando había estado así.

Pensé que estaba curada, NO, a la semana, volvieron los dolores,la fiebre, más fuertes, en más lugares de mi cuerpo...volví a la Doctora y se extrañó de que me hiciera tan pocos días efecto la inyección y me dijo que no era bueno, pero le rogué que me pusiera otra inyección porque no podía cuidar a mi hija, ni casi vestirme.

Llegó el día de ir al Especialista, y allí contándole todo, y muchas más preguntas que me hizo, llegando incluso a la niñez, allí se enlazaron mis dolores de pies, que siempre había tenido y ese cansancio que era parte de mi, desde que tengo recuerdos.

No me dijo nada, yo todo era preguntarle que me pasa, él me dijo que un cáncer de huesos no era, pero tenía que hacerme muchas pruebas...me las hizo y análisis.

Todo urgente en un par de días, no sé cuantas pruebas me hicieron...recuerdo unas radiografiás, que la radiología que me las había hecho, mientras me vestía me dijo: le duelen los pies? Yo le dije que mucho y ella me dijo que nunca había visto unos pies como los míos, no en una persona, si en libros cuando estudiaba...y vi en sus ojos, comprensión y pena...

llegó el día de los resultados, y yo seguía inyectándome una dosis de Cortisona semanal...Me dijo el Traumatologo, usted tiene una enfermedad degenerativa que se llama ARTRITIS REUMATOIDE, la primera vez que yo había oído esa palabra. Me dijo que estaba muy avanzada, que mi cuerpo se iba a retorcer con dolor y la limitación para hacer una vida “normal” estaba allí, conmigo. No obstante como en ese Hospital no había Servicio de Reumatologia, y yo lo necesitaba, me enviaba al Hospital Clínico de Zaragoza, con el Jefe del Departamento, según él, aparte de haber sido su profesor era uno de los mejores en su campo en toda Europa.

Me dio unos antiinflamatorios para que tomara diariamente dos, aunque me encontrara bien, que esta enfermedad era así, funcionaba a “brotes” un día podía parecer que estaba mejor, pero no era así si bajaba la guardia y no tomaba la medicación volvería a “atacarme” porque era mi propio cuerpo quién me estaba atacando, y más fuerte, tenía una enfermedad Inmunologica, otra palabra nueva para mí.

El padre de mis hijos estaba allí conmigo, fue la primera visita a la que vino y a la última. Cuando salí de la consulta, mi cabeza era un carrusel, estaba enferma, pero me iba a curar? Podría volver a estar bien? Iba a ir a peor? Cuanto tiempo estaría enferma? TANTAS PREGUNTAS, TANTOS INTERROGANTES, TANTO MIEDO...

Todo quedo relegado a 9 meses después que fue lo que tardaron en darme una visita preferente al Reumatologo, y habiéndome dicho que no fuera a ningún otro médico, entonces yo tenia un Seguro privado, que me dijo que no lo usara porque nadie mejor que el Doctor Armas, la primera vez que oí el nombre de una persona que se iba a convertir en parte tan importante de mi vida., era el mejor, que esperara a la citación.

Mientras seguía, mal, pero llevándolo mejor, nunca más en casa se trató del tema, mis padres pensaron que ya estaba curada y el padre de mis hijos, que el Especialista había sido un exagerado y que ahora me iban a marear, todo por ir al médico...

Seguía pinchándome, entonces cada 15 días, aún con el temor de lo que me podía ocurrir, pero le decía a la médica, tienes que ponérmela, si no no puedo criar a mi hija...y ella como madre me entendía, así fueron pasando los meses.

El día de la Primera Comunión de mi hijo y del Bautizo de mi hija, que fue a la vez, lo recuerdo como uno de los peores de mi vida, iba completamente medicada, los demás no notaron nada pero por dentro estaba destrozada...

Sin tener un día bueno, solo la alegría de ver crecer a mis hijos sanos y felices, porque nunca me veían llorar, siempre tenia tiempo para ellos, aunque por dentro estuviera partiéndome de dolor.

La llegada del Dr. Armas y la verdad de la ARTRITIS REUMATOIDE, será para otra entrada, porque esto es resumido, unos años de la vida de una mujer joven, madre, esposa, hija, amiga, que trataba de llevar una vida “NORMAL” y no podía...